Cómo podar un hibiscus
hace 10 meses · Actualizado hace 10 meses
El Hibiscus, también conocido como rosa de China, cayena o amapola, es un arbusto el cual se le considera como pequeño, que llega a alcanzar los 5 metros de altura y es cultivado como ornamento en los países tropicales y subtropicales. A pesar de que es utilizada de forma ornamental, en ocasiones llegan a consumir sus hojas tiernas para sustituir la espinaca, así como las flores, bien sea crudas o cocidas y también se usan como colorante. Entre sus propiedades, según la medicina china, resaltan el ser antiespasmódicas, astringente, anti irritante, e incluso, un laxante suave.
En general, sus cuidados son sencillos, y eso lo hace ser una de las favoritas para plantar y conservar en los patios o en macetas. Cuando se encuentran en pleno apogeo, durante la floración, el suelo lo mantendremos húmedo, ya que suele ser en verano, sin embargo, tendremos que idearnos un buen drenaje para evitar que el suelo se encharque y marchitemos el Hibiscus. En invierno, la demanda de agua es muchísimo menor, y si la cultivas en interiores, pulveriza las hojas de forma regular, ya que esto te ayuda a mantener la humedad.
Otro punto resaltante es el fertilizante, el mejor que puedes usar en primavera, es el que viene en presentación granulada y es de liberación retardada. Al llegar el momento de floración, abona cada quince días. Para complementar los cuidados, no debes olvidar las podas, esenciales en cualquier jardín.
¿Por qué podar el Hibiscus?
El Hibiscus presenta un crecimiento con flores de tipo terminal, es decir, crecen al final de cada rama. Si nuestra planta se encuentra en buen estado, la poda fomentara su crecimiento y aumentara la producción de flores. No obstante, si está deteriorada, la poda ayuda a detener el daño y prevenir mayor percance en el desarrollo de nuestro Hibiscus. Es bastante frecuente que florezca por varias temporadas, pero en algún momento se estanque, en este caso, la poda promueve su rebrote.
Otra razón para podar tu arbusto es que te permite detectar al escarabajo del Hibiscus y si aparece, puedas eliminarlo a tiempo. Lo ideal es que lo rocíes frecuentemente, pues este insecto afecta los brotes nuevos conforme aparecen. Tenemos pues, que la mejor forma de espantar al escarabajo o de prevenir que ataque, es con la aplicación de un insecticida cada dos semanas, cuando se encuentre en temporada de crecimiento.
¿Qué necesito para podar
Para comenzar con la poda no necesitas nada extraordinario: una tijera de poda que sea fácil de manejar y un serrucho en caso de que consigas ramas de mayor grosor. Es de suma importancia que ambas herramientas estén bien afiladas y tengas a la mano alcohol para desinfectarlas con un trozo de tela limpio antes y después de usarlas.
¿Cuál es la mejor época para hacerlo?
La época exacta es muy difícil de determinar pues varía según tu ubicación en el globo terráqueo, sin embargo, como es una planta autóctona de climas cálidos, lo mejor es que las podas más profundas sean comenzando primavera y las menos significativas, en otoño. Si hacemos las podas principales en otoño e invierno, evitara la aparición de brotes cuando llegue la primavera. Claro está que los tallos florales y las flores debes quitarlas cada vez que se marchitan, evitando con esto, que se vean enfermas.
¿Cómo se podan los Hibiscus?
Como el objetivo principal de la poda de Hibiscus es obtener ramas nuevas, mientras lo hagamos debemos saber qué forma queremos darle para hacer los recortes según esto. Lo primero es podar las ramas que estén creciendo hacia fuera, ya que lo deforman. Cortalas manteniendo un ángulo de 45° hacia arriba, con cortes 6cm por arriba de los nudos. Es importante que mantengamos la parte inferior de cada corte, próxima a la parte central del arbusto y, la zona superior del corte, la situemos en el área exterior del Hibiscus.
El tratamiento que debes darle si buscas obtener ramas en una zona cercana al suelo es el del pinzado, cortando los extremos de las ramas superiores. Luego, elimina las de apariencia enferma, débil o que se encuentran fuera de la forma que hemos escogido, consiguiendo un aumento considerable en la producción de flores. El pinzado también es recomendable en plantas jóvenes o para personas que están comenzando en la jardinería ya que simplemente necesitas cortar las puntas de cada rama, por encima del último nudo.
La poda no tiene otra técnica adicional a lo que hemos mencionado anteriormente, sin embargo, no es recomendable que en la poda vayas más allá de 2/3 en una rama, pues la planta esta vulnerable e incluso puedes dañarla. Fuera de esto, puedes ser libre a la hora de modificar la figura del arbusto: como un arbolito o redondeado.
Otro consejo usual es que realices una poda completa a principios de temporada. Si decides hacerlo, debes cortarla entera para que de esta forma, pueda producir una mejor cosecha. Generalmente, produce sentimientos encontrados, ya que debes cortar la mayor parte de la planta: sólo debes dejar 2 o 3 nudos por cada ramo, respetando el principio de 2/3 de por rama para evitar debilitarla.
Por el contrario, también puedes escoger una poda correctiva, para arreglar problemas menores en la planta, es decir, aquellas ramas deterioradas o enfermas que visualizamos a tiempo, para esto, si cortamos lo necesario de la rama dañada: si observas que la madera es de color verde, es indicativo de que puede recuperarse pero si la madera es dura y blanca, ya es caso perdido: no habrá brotes.
Como último recurso, tenemos la poda severa, que es cuando la mayor parte se encuentra muerta o dañada, lo que significa el corte de todas las ramas, para así, mostrar todos los brotes vivos, de manera tal, que si se hace a tiempo, la planta pueda recuperarse y crezca nuevamente. Tal vez no funcioné si el Hibiscus ya ha muerto por completo. Para evitar este tipo de poda, es necesario cuidarla de pulgones, cochinilla, la araña roja y la mosca blanca.